La Dinaf acepta devolver a los niños a los hogares, pero sus condiciones generan polémica en la Iglesia 

19/12/2018

La tormenta desatada tras el retiro de 25 niños de hogares administrados por instituciones eclesiásticas en San Rafael no cesa. Este lunes, Elisabeth Crescitelli, ministra de Salud de Mendoza, rama del Ejecutivo que tiene potestad sobre la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), reconoció que las relaciones entre las partes están dañadas, pero aseguró que el Estado buscará un acercamiento, y dejó abierta la puerta a un acuerdo que permita que los menores regresen a los hogares.

Pese a la grieta entre las partes, la Ministra dijo que el Estado está dispuesto a reescribir el contrato, pero enumeró tres condiciones: que las cuatro monjas presuntamente señaladas como autoras de los maltratos no vuelvan a tener contacto con los niños y sean investigadas judicialmente; que se acepten sin objeciones las herramientas de control; y que se cree una “mesa de trabajo interdisciplinaria” entre las partes.

Asimismo, Crescitelli sostuvo que la Dinaf nunca tuvo intenciones de romper las relaciones con los hogares, sino que fueron las instituciones religiosas quienes, tras describir como “arbitrarias” las intervenciones estatales, optaron por interrumpir el contrato que unía a las partes, ruptura que obligó al retiro de los niños.

Los hogares, dijo la Ministra, consideraron una intromisión desmedida la evaluación de profesionales independientes que se presentaron a practicar sesiones de “escucha activa” a los niños, luego de recibir denuncias anónimas que advirtieron sobre presuntos maltratos y dispararon las alarmas. Crescitelli describió estas revisiones como una obligación del Estado. “Ante la sospecha o presunción de violencia, debemos tomar medidas de protección”, recordó.

Según la Ministra, las instituciones eclesiásticas no mostraron disposición a aceptar las auditorías e impusieron una ruptura “unilateral” de la unión. “Nuestra intención nunca fue romper el convenio”, comentó

Por el contrario, el abogado Emanuel Codutti, parte de la defensa de las instituciones religiosas, dijo este martes en diálogo con Mediamendoza que nunca hubo oposición a aceptar las auditorias de los operadores de la Dinaf, aunque sí confirmó que hubo reacciones ante presuntas actuaciones irrespetuosas contra la institucionalidad de los hogares. “Siempre hubo apertura, pero en el marco del respeto”, señaló. La disposición, agregó, está en pie; pero en tanto se respete la "estructura familiar" de los hogares.

Este lunes, decenas de personas se manifestaron para pedir la reincorporación de los niños a los hogares. Pero las relaciones siguen estacionadas en una virtual parálisis. Los menores aguardan la resolución del conflicto en un complejo de cabañas, alquiladas especialmente por la Dinaf. El futuro está abierto.